La vuelta al cole ha llegado. Parece mentira que el verano nos haya dejado tan rápido y que tengamos que volver a la rutina, pero es un hecho. Los más peques son los grandes protagonistas de esta época por su vuelta al colegio principalmente, por lo que este artículo está dedicado para ellos.

Premisas a tener en cuenta

Lo primero que hay que saber es que la detección temprana de problemas que haya en los pies, o bien en la postura, ayuda a evitar alteraciones que pueden existir en el crecimiento y el desarrollo del menor. Asimismo, un problema en la postura que sea detectado a tiempo siempre será más fácil de corregir. Por ello, es importante realizar un estudio biomecánico infantil en el que se revisa la alineación correcta de todos los segmentos corporales desde los pies, rodillas y espalda hasta la propia espalda. Por si lo desconocías, los problemas de pies del niño pueden afectar en las actividades físicas y deportivas que realice.

En cuanto a la edad a la que los niños pueden empezar a utilizar plantillas, es relativa según la patología que presenten. Sin embargo, los 4 años es la edad perfecta para evaluar a los niños, pero los hay que tienen problemas más graves que necesitan un diagnóstico más temprano. Algunas de las alteraciones del niñ@ pueden evolucionar positivamente con la edad y su correcto control periódico. No todos los niñ@s tienen que llevar plantillas ni tratamiento con la misma alteración, dependerá de su forma física y actividad que practique.

Mi hijo camina mal. Mi hijo desgasta mucho el calzado. A mi hijo le cuesta caminar…

En cuanto a los síntomas más evidentes, destacan varios. En primer lugar, el niño puede quejarse de dolor de pies, tobillos o rodillas; o los propios familiares detectar que tuerce un pie, una rodilla o la espalda. Asímismo, tener los pies planos-valgos o que el niño se caiga con frecuencia o corra con dificultades; o incluso que no le guste el deporte también son síntomas a tener en cuenta. Por otra parte, si existen factores hereditarios, también hay que tenerlos en cuenta.

La importancia de la marcha en el menor

El podólogo aconseja  en algunos casos el uso de plantillas a medida y consejos por la preocupación existente de los padres y familiares del niño o la niña al observar que no caminan correctamente o se caen frecuentemente.

Lo más importante es realizar un diagnóstico adecuado tras un estudio completo de la postura y de la marcha para detectar anomalías y que el niño pueda disfrutar de todo lo bueno que tiene su desarrollo y crecimiento en todos los ámbitos. Colocando un tratamiento si es preciso o explicando a los padres los ejercicios o actividades que el niñ@ debe realizar y cómo debería evolucionar.