¡Qué alegría nos da el verano! La playa y la piscina se convierten en nuestras mejores aliadas para combatir el calor, que parece que es el único inconveniente que trae el verano. Sin embargo, debes saber que el verano también trae consigo algunos enemigos que conviene tener muy en cuenta: hablamos de las verrugas plantares. ¿No sabes de qué se tratan y cómo tratarlas? En este artículo, desgranamos cuáles son las claves.

¿Qué son las verrugas plantares?

Las verrugas plantares o también conocidas como papilomas, son lesiones epiteliales hiperqueratósicas y circunscritas de naturaleza benigna que están originadas por el denominado virus de papiloma humano. Por si no lo sabías, existen más de 100 genotipos diferentes de este tipo de papiloma, pero concretamente aquellos que ocasionan estas verrugas, con los genotipos 1,2 y 4. En cuanto al período de incubación, puede oscilar entre los 2 y los 20 meses. En cuanto a los factores que pueden dar lugar a ellas, es el hecho de acudir a lugares públicos donde puede haber contagio directo e indirecto de este virus, como las piscinas o los baños. Además, la ropa y prendas como calcetines, chanclas y calzados también favorecen el hecho de que pueda existir contagio indirecto de la lesión. Para prevenir su aparición, es recomendable la higiene diaria del pie y aplicar crema para que la piel se mantenga íntegra, utilizar escarpines en piscinas para evitar el contacto directo y no intercambiar prendas relacionadas con el calzado.

¿Cuáles son los síntomas y el tratamiento?

Es de aspecto queratósico, como los callos. Aunque no es muy fácil diferenciarlos, estas lesiones tienen unas características únicas. En primer lugar, es doloroso al pellizcar y no cuando lo presionas. Asimismo, se rodea de un halo un tanto blanquecino y es frecuente el hecho de que aparezca un punteado negruzco por la trombosis de vasos sanguíneos que nutren a la verruga. En dichos vasos, se produce un sangrado por el hecho de eliminar con el bisturí la queratosis.

Se suelen crear en zonas de presión o roce donde la piel se encuentra más débil y donde existe mayor cantidad de queratina. En cuanto a las zonas donde aparecen con más asiduedad, son debajo de las cabezas metatarsales, lateral de primer dedo y talón.

En cuanto al tratamiento, destacan la cantaridina, ácido nítrico, vaselina salicílica, crioterapia, bleomicina, homeopatía y la cirugía. Teniendo en cuenta la prevención, podremos evitar que aparezcan estas desagradables verrugas que no harán otra cosa, que perjudicar nuestro verano.

 

Lo ideal es siempre acudir a un especialista para conocer mejor las causas y su tratamiento. En Clínica Luis Salvador conocemos todos los tipos de verrugas plantares que hacen que pasemos unos días más que molestos. Por eso, si sufres esta patología te invitamos a que nos visites sin compromiso para estudiar mejor tu caso. ¡Te esperamos!

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